¿Viajar sin moverse del sillón?
Al paso que vamos, no podemos descartar del todo una futura modalidad de viajero: el virtual, o el no-viajero, que gozará de todas las sensaciones (inducidas) del viaje sin moverse de la silla.
La forma más segura de viajar sin sufrir las incomodidades del aeropuerto o los retrasos de los vuelos. Es el Neurotravel: a través de electrodos y sensores de todo tipo aun por inventar podremos encontrarnos en cuestión de segundos contemplando el Sol de Medianoche en el cabo Norte o asistiendo a un espectáculo de danza del vientre en el desierto de Jordania.
Sin duda todo esto acabará destruyendo el hechizo de los viajes tal y como ahora los sentimos. Esperemos que en el futuro siga persistiendo el espíritu inconformista y curioso del ser humano que desprecie estas modalidades de turismo y siga pensando, como decía Kavafis, que el viaje no es el medio, sino un fin en sí mismo.
Proyectos del futuro
¿Cómo serán las vacaciones del futuro? Arquitectos, operadores turísticos y expertos en el sector trabajan hoy en fabulosos proyectos donde las nuevas tecnologías y la conciencia ecológica tienen un protagonismo especial. Viajes al espacio, islas artificiales y hoteles imposibles, entre las propuestas más asombrosas.
Los expertos anuncian que el turismo de masas tiende a desaparecer, y no solo a causa de la crisis que nos martillea a todos, sino también porque contribuye al deterioro del patrimonio mundial. Algunos científicos recomiendan el cierre del acceso a lugares especialmente sensibles como el Machu Picchu en Perú, el Valle de los Reyes en Egipto o el Kilimanjaro.